Si, si su actividad ha quedado suspendida y tiene más de 360 días cotizados podrá percibir la prestación contributiva por desempleo, y cuando vuelva a encontrarse desempleado involuntariamente y solicite la reanudación de la prestación que se le reconozca ahora, se le volverá a poner al cobro lo que se le haya pagado, con un máximo de 90 días, como si no lo hubiera percibido.
Si su actividad ha quedado suspendida o no se ha podido reincorporar y carece del periodo de ocupación cotizado necesario, tendrá derecho a una prestación contributiva que se percibirá hasta que se incorpore con un límite máximo de 90 días Solicite a la empresa la emisión de un certificado de empresa en el que haga constar la imposibilidad de reincorporación como consecuencia del coronavirus.
Si no se ha podido reincorporar y estaba cobrando la prestación de desempleo puede continuar cobrándola y si se agota el paro y continuara por este motivo sin poder incorporarse a su puesto de trabajo, una vez cumplido el plazo de espera de un mes, podrá obtener el subsidio por desempleo, siempre que cumpla todos los requisitos para ello. Y, cuando vuelva a encontrarse desempleado involuntariamente se le volverá a poner al cobro lo que se le pague ahora, con un máximo de 90 días, como si no lo hubiera percibido.